Como convertir una idea en un negocio exitoso
¿Tienes una idea de negocio genial? Pero, ¿no sabes como desarrollarla o si realmente es muy buena? Sigue leyendo y descubrirás como saber si tu idea es genial y de ser así, como convertir una idea en un negocio exitoso.
El mundo está lleno de personas con millones de ideas para desarrollar un negocio, muchas de ellas tienen potencial importante para convertirse en un negocio exitoso, sin embargo, del total de personas que deciden intentar materializar sus ideas de negocio, son muy pocas las que consiguen convertirlas en un negocio exitoso.
Esto puede ocurrir debido a muchas razones como la falta de dedicación, el desorden administrativo o una mala idea, no obstante, también es posible que ocurra aún, cuando un emprendedor trabaje incansablemente, se administre muy bien y tenga una muy buena idea de negocio.
Con base en nuestra experiencia asesorando a emprendedores durante 15 años, hemos comprobado que una de las causas, sino la causa principal, de que tantas ideas (incluyendo las buenas) “fracasen”, es la falta de conocimiento sobre los aspectos más relevantes que se deben evaluar y definir o redefinir al momento de emprender un negocio para que sea exitoso.
Por esta razón amigo(a) emprendedor(a), a fin de orientarte para que tu idea de negocio no sea un “fracaso” sino un éxito, a continuación, te vamos a indicar y a comentar los pasos que debes seguir para convertir una idea en un negocio exitoso.
Pasos para convertir una idea en un negocio exitoso
El principio de todo negocio exitoso alguna vez fue una idea, pero para que esa idea se transforme en un negocio próspero se requiere de los pasos que señalamos a continuación.
1.- Definir la idea de negocio
En este aspecto se pueden presentar dos casos; uno es que el emprendedor ya tenga una idea más o menos establecida de un producto o servicio y, el otro es que el emprendedor no tenga ninguna idea aún, pero esté pensando, observando y analizando continuamente varias alternativas de su interés para transformarlas en una idea de negocio.
En ambos casos, lo recomendable en principio es que la(s) idea(s) estén asociadas a los talentos, pasiones, experiencia o formación del emprendedor(a), aunque no es limitativo, ya que, en nuestra opinión depende más del espíritu emprendedor y de la disposición de las personas a aprender y a buscar las mejores soluciones a las limitantes o problemas que se presenten.
Lo más importante y recomendable, es que está idea nazca de un propósito, de un proyecto de vida orientado a solucionar de manera conceptual un problema no resuelto o satisfacer una necesidad no atendida, de uno o varios segmentos de mercado o, en caso de que existan empresas que se ocupen de ese problema o necesidad, hacerlo de una manera diferente y/o mejor que la competencia.
2.- Crear una propuesta de valor
La propuesta de valor es también conocida como oferta de valor y, consiste en transformar la “idea general” o conceptual en un producto o servicio teórico, teniendo presente que debe cumplir con los siguientes elementos:
- Debe estar dirigida a uno o varios segmentos de mercado claramente definidos.
- Debe indicar que problemas resolverá o que necesidades atenderá del público objetivo definido.
- Debe especificar de que forma resolverá esos problemas o atenderá esas necesidades del público objetivo definido.
- Debe señalar cuál es el valor que proporciona a los potenciales clientes y de qué manera se diferencia de la competencia, en caso de que la hubiere.
Ver completo en: Crear una propuesta de valor.
3.- Realizar un estudio de factibilidad
Una vez que tienes el producto o servicio que piensas ofrecer como solución para resolver un problema o atender una necesidad del público objetivo establecido, debes evaluar si es viable y conveniente transformar la propuesta de valor en un negocio con potencial para ser exitoso.
Esta viabilidad y conveniencia puede abarcar muchos aspectos, pero lo ideal en esta etapa es enfocarse en verificar la factibilidad operativa, técnica y financiera del posible negocio.
No obstante, esto debe hacerse sin profundizar demasiado, invirtiendo pocos recursos y tiempo, ya que el objetivo es estimar si cuentas con los recursos requeridos (operativos, técnicos y financieros) o con la forma de adquirirlos para materializar el negocio y, si el hacerlo, puede justificar la inversión o búsqueda de dichos recursos.
Si el estudio de factibilidad resulta positivo se puede seguir adelante con el desarrollo de la idea de negocio y si, por el contrario, resulta negativo, lo recomendable de ser posible, es elaborar otra propuesta de valor asociada a la idea de negocio o incluso pensar en una idea distinta o similar, pero para otro público objetivo.
Ver completo en: Estudio de factibilidad.
4.- Diseñar un producto mínimo viable
El emprendimiento en la actualidad requiere de muchas competencias o características para tener éxito y, dos de las más importantes son la agilidad y capacidad de optimizar los recursos al momento de generar productos o servicios innovadores que proporcionen valor a un público objetivo.
En ese sentido, el Producto mínimo viable (PMV) es una metodología, herramienta o técnica que permite pasar de una idea teórica de un producto o servicio a la versión más rápida, sencilla y “tangible” que se pueda desarrollar de ese producto o servicio.
De esa forma puedes tener una versión que se pueda ver o tocar e incluso en algunos casos usar y, que cumpla con los atributos o características mínimas que van a diferenciar tu producto o servicio de la competencia y a proporcionar valor al público objetivo.
El PMV se desarrolla con la finalidad de poner a prueba la hipótesis de que el producto o servicio que se pretende desarrollar, es atractivo y genera beneficios a una parte del público objetivo, hasta al punto de que estarán dispuestos a pagar y adquirirlo antes que a los productos o servicios de la competencia.
Adicionalmente, el PMV permite a través del feedback recibido por parte del público objetivo, aprender sobre las características tanto del producto o servicio como del público en cuestión, para luego, en función de lo aprendido, optimizar dichas características o incluso, dirigirse a otro público objetivo.
Así, al momento de salir al mercado a comercializar el producto o servicio, tendrás una propuesta de valor probada y optimizada con grandes probabilidades de capturar valor, es decir, de generar ingresos importantes y convertir una idea en un negocio exitoso.
Ver completo en: Producto mínimo viable.
5.- Elaborar un Plan estratégico de negocios
Posterior a la definición de la propuesta de valor y del segmento de mercado al que se va a dirigir dicha propuesta, debes elaborar un plan estratégico de negocios que sirva como guía para convertir tu idea de negocio y tu visión, en acciones tangibles orientadas a materializar la puesta en marcha, funcionamiento y posicionamiento de la empresa.
Este plan debe incluir en principio los aspectos típicos de un plan de negocios y del plan de marketing como lo son:
- Resumen ejecutivo.
- Descripción de la empresa.
- Análisis del mercado.
- Requerimientos operativos.
- Equipo de organización y gestión.
- Indicadores y proyecciones financieras.
- Descripción de los productos y/o servicios.
- Definición o política de precios.
- Plan o política de ventas y distribución.
- Plan o política de promoción y publicidad.
No obstante, debe incluir además los elementos estratégicos que indiquen la ruta a seguir para convertir la idea en un negocio exitoso, entre los que están:
- Los objetivos.
- El análisis interno de la empresa.
- El análisis externo del entorno en el que se va a desenvolver.
- El análisis estratégico.
- El plan de acción para alcanzar los objetivos planteados.
- Las políticas de seguimiento, control, análisis, evaluación y optimización del plan estratégico.
Ver completo en: Plan estratégico de negocios.
6.- Registrar legalmente la empresa
Una vez que tienes el camino trazado y la brújula para para no perder el Norte durante los obstáculos y desviaciones que se te presenten en el trayecto de convertir una idea en un negocio exitoso, es el momento de dejar la etapa de investigación, prueba, evaluación, creación y planeación, para pasar a la etapa de ejecución, la cual debe empezar por el registro de la empresa.
Para seleccionar la estructura jurídica es muy importante tener presente que, dependiendo del tipo de figura jurídica que se escoja para registrar la empresa, se podrán, proteger o no los activos personales y pagar más o menos impuestos.
7.- Proteger la marca
Después de registrar la empresa, el siguiente paso es proteger la marca asociada al producto o servicio a comercializar.
Para ello, debes deinir el nombre y diseñar el logotipo de la marca (dependiendo del tipo de marca, puede incluir otros elementos) y luego, presentar la solicitud de registro de marca ante el organismo encargado de tramitar esas solicitudes en el país donde se vaya a iniciar el negocio, cumpliendo con el procedimiento y los requerimientos establecidos, que son parecidos, pero varían en cada país.
Este paso, contrario a lo que muchos emprendedores piensan, es de suma importancia, ya que le va a generar a una empresa una serie de beneficios como:
- Diferenciar sus productos de la competencia.
- Obtener el derecho a utilizar su marca de forma exclusiva.
- Proteger un activo que puede y debe llegar a convertirse en el activo más importante de su empresa.
8.- Realizar los trámites de permisos y/o licencias
Este aspecto es fundamental para iniciar con buen pie el negocio desde el punto de vista legal, pero también para determinar los lapsos de solicitud y aprobación aproximados de los trámites y/o licencias, ya que, dependiendo de estos lapsos, la puesta en marcha del negocio llevará más o menos cantidad de tiempo.
Estos lapsos generalmente varían en función del tipo de negocio y del país donde se vaya a iniciar la operación del mismo.
Adicionalmente, dependiendo del tipo de negocio y de los recursos disponibles, se requiere de otras acciones como las siguientes:
- Arrendar o comprar un local comercial y acondicionarlo.
- Adquirir mobiliario, maquinarias y/o equipos.
- Seleccionar, contratar y entrenar personal.
- Comprar materia prima e insumos.
- Elaborar una web.
- Contratar como asesores a un Contador público, un(a) Abogado(a) y Community Manager, entre otras cosas importantes para el adecuado funcionamiento del futuro negocio.
En este sentido, desde hace un tiempo ha habido un auge del emprendimiento latino en USA, como consecuencia de muchas ideas que han convertido en negocios exitosos.
Auge del emprendimiento latino en EEUU
De acuerdo con la Universidad de Stanford, en los últimos 10 años el crecimiento del emprendimiento latino ha superado con creces si se compara con el número de dueños de negocio en Estados Unidos.
No obstante, la mayoría de los emprendedores latinos tienen dificultades para lograr el crecimiento de sus negocios, por lo general, debido a los errores cometidos en la gestión de su empresa y el desconocimiento de las oportunidades de formación, financiamiento y asesoramiento.
Por consiguiente, para evitar que esto te ocurra, debes desarrollar tu idea de negocio inteligentemente para emigrar a USA, aplicando los pasos que te hemos dado en este artículo.
Sin embargo, estamos conscientes que seguir estos pasos es un camino difícil, pero posible, es un reto que tienes mayores probabilidades de superar si cuentas con el apoyo de profesionales con conocimientos y experiencia probadas en los pasos requeridos para convertir una idea en un negocio exitoso.
Ver completo en: Auge del emprendimiento latino.
Así que, si tienes una idea de negocio y quieres desarrollarla en USA, ¡podemos ayudarte!